
Estar en un accidente puede ser aterrador y caótico, pero lo que hagas en los momentos siguientes puede marcar una gran diferencia. Lo primero y más importante es verificar si hay lesiones y llamar al 911 de inmediato. Incluso si tus heridas parecen leves, es fundamental que un profesional médico te evalúe. Esto no solo es importante para tu salud, sino que también proporciona documentación médica desde el inicio, lo cual puede respaldar cualquier futura reclamación.
Si estás a salvo y físicamente en condiciones, reúne toda la evidencia posible en el lugar del accidente. Toma fotos de los vehículos, las placas, las condiciones del camino y cualquier lesión visible. Intercambia información de contacto y de seguros con el otro conductor, pero evita hablar sobre quién tuvo la culpa en el lugar. Si hay testigos, trata de obtener su información de contacto también—sus declaraciones pueden ser muy útiles más adelante.
Después de recibir atención médica, lo más recomendable es contactar a un abogado de lesiones personales. El proceso legal puede ser complicado, y las compañías de seguros no siempre actúan en tu mejor interés. Un abogado con experiencia se encargará de la comunicación, te ayudará a evitar errores y construirá un caso sólido para obtener una compensación completa por tus lesiones, daños a la propiedad, pérdida de ingresos y sufrimiento.
No tienes que pasar por esto solo. Estamos aquí para ayudarte a tomar decisiones inteligentes e informadas desde el principio. Ya sean lesiones menores o graves, te acompañaremos en cada paso del proceso legal, defenderemos tus derechos y lucharemos para obtener el resultado que mereces, para que puedas enfocarte en sanar y recuperar tu vida.
Luchamos por la justicia de las familias tejanas como si fueran nuestras propias familias.
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